Algo digno de mí...

Ya no acostumbro a poner lo que me pasó en el día pero si hoy no lo hago los pocos lectores que se dan la paja de leer esto se van a perder la ocasión de reirse de un pobre mechón hue'ón póngase cómodo Sr(a, ita) lector(a) que está próximo(a) a leer una de las estupideces más grandes que le puede pasar a alguien no estando en su propia casa:

Este era un mechón que vive en una pensión y que tenía clases a las 9 de la mañana (como todo día viernes).

7:30 de la mañana, la alarma del celular suena: "un ratito más", dice el mechón apretando una tecla de su celular, diez minutos después la alarma suena de nuevo: "otro ratito, cortito" dice el mechón apretando la tecla 'c' de su celular, un error que traería consecuencias casi catastróficas para el mechón, mientras se da 'el ratito' escucha como al lado de su pieza (en la cocina) conversan la dueña de la pensión con su hijo, "entran más temprano que yo, debo estar bien en la hora" dice el mechón aliviado.

Cuando despertó de ese ratito ya eran como las 8:30, el mechón se asusta y exclama "mierda!, otra vez tarde!" se sienta en la cama y toma una decición "no iré a seminario de Química, es tonto, fome y pa' mi no hay nada nuevo... mejor llego a las 10 y doy el control de Climatología". Se levantó, duchó, vistió, desayunó y lavó sus dientes. Estaba listo para partir y eran 20 minutos para las 10.

Revisó la plata para la micro, se puso sus audífonos, su bufanda, su parka, su mochila y se disponía a salir.

Llegó a la puerta principal, giró la manilla en sentido contrario a las agujas del reloj (no es nada mágico, así se abre la puerta, en serio) y 'TCHK', sonó la puerta... "bah, que raro, cerraron... no importa, tengo mi llave", tomó su llave, la introdujo en la cerradura, la giró en sentido contrario a las agujas del reloj para quitar el cerrojo (como casi todas las puertas) y... HORROR!! La puerta no se abrió "mierda... ontra vez" pensó el mechón mientras intentava abrir la puerta una, otra y otra vez; sus manos comenzaron a sudar y de pronto vio unas llaves colagadas "mi salvación!", exclamó. Probó con las tres posibles llaves y ninguna pudo abrir la puerta.

Resignado el mechón vio la hora: 10 de la mañana... "no queda más remedio que quedarse y esperar" dijo el mechón (pensó en salir por una ventana pero recordó que la casa no era suya)... Subió y se fue al computador.

Instalado en el computador el mechón aprovechó de rehacer un trabajo, tipeó su parte, la de su compañero pero al llegar a la parte de sus compañeras tuvo que hacer esa parte por completo: los datos estaban errados. Lo envió una hora más tarde de lo que le dijeron (era un trabajo lleno de calculos numéricos y 1/3 de él estaba malo, se demoró como 1 hora en reparar el error).

Con el trabajo enviado el mechón sintió que debía hacer algo... lavó la loza del desayuno como buen niño que es.

Actualmente (18:09 hrs) sigue encerrado, nadie ha llegado a su pensión, almorzó un vaso de leche fría, tiene frío y no ha prendido la estufa porque el chispero suena muy fuerte y lo asusta.
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He ahí la historia, no creo que sea necesario escribir quién es el mechón, no?
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Actualización: El Mechón pudo salir después de las 21:00 hrs, hora en la que llegó la dueña de la pensión.